Emociones digitales

Todos conocemos el suceso acontecido la pasada noche de Halloween en el Madrid Arena. Multitud de jóvenes, hasta olvidar el límite del aforo, se reunían para pasar la noche de brujas y fantasmas entre música y amigos hasta que se desató la tragedia. La investigación de la policía está siendo muy seguida por una sociedad muy consternado por el suceso en el que fallecieron 4 jóvenes con edades comprendidas entre los 17 y los 20 años. El dolor, la rabia y la impotencia se reflejan en las redes sociales que echan humo pidiendo justicia para que el ánimo de lucro de empresarios e instituciones no se cobren más vidas.



Los sentimientos de los jóvenes son expuestos en twitter, facebook y tuenti entre los que se cuelan llamamientos de amigos y familiares que piden la colobaración de los asistentes a la macrofiesta madrileña para desmontar las explicaciones de la empresa divertt, al cargo de la fiesta, que jura y perjura que no llegaban a 10.000 asistentes. Sin embargo, twitter arroja una rayo de esperanza hacia los indignados por esta situción, al haber refeljado como uno de los Dj escribía en su cuenta "Gracias por venir. No me creo que hayamos llegado a ser 20.000 personas aquí". Queda así desprestigiada la palabra del ayuntamiento de la Comunidad de Madrid y, por supuesto, la de divertt. Twitter ha contribuido, sin quererlo a la justicia.